Dictar no es tan fácil

En este momento, estoy probando un programa de dictado. Es emocionante dictarle a la computadora, aunque es algo conflictivo. Creo que me estoy tardando más que si lo hiciera con las manos. ¿Qué puedo decir? Eunice va a venir en un rato. No se ha qué hora llegue, pero no lo esperaba aquí. Ayer me comí veinte tacos, seis fueron de pastor, ocho de suadero y seis de bistec. Mi papá me ayudó con dos de bistec, pero el atascón de todos modos fue grande. Hoy estoy algo mal del estómago.

Mi papá llegara en un rato, dictar no es tan fácil se podría creer. La música me distrae un montón ¿será porque es en japonés? No se, hasta el micrófono es prestado. Estoy muy bien bañado y de todos modos me siento sucio, creo que me voy a bañar otra vez. Ya sé qué te puedo decir!, ¿o ya había dicho que iba a serruchar mi compu? Pues ya casi termino. Atornillé el disco duro al DVD, a él lo atornillé encima de las tarjetas, a la fuente de poder la posee encima del procesador.

Prácticamente podría decir que reduje todo al espacio de la tarjeta madre, y lo mejor de todo es que las entradas quedan así enfrente, la lengua DVD sale hacia los enchufes, y aunque te aviente el aire hacia la cara, la satisfacción de serruchar tanto es grande. Mañana tal vez tenga examen, esos mi maestra me lo quiere hacer. Bueno, ya me canse de dictar definitivamente escribo más rápido yo. Ahora voy a hacer una traducción astrológica.